lunes, 29 de octubre de 2018

Carrera : Ciclocross de Mejorada del Campo (Madrid)

Carrera : CX de Mejorada del Campo
Lugar : Mejorada del Campo (Madrid)
Fecha : 28 de Octubre de 2018

El dentista no hay que demorarlo nunca




Este pasado Domingo, 28 de Octubre se celebraba el VI Trofeo de Ciclocross de Mejorada del Campo, ahí donde por unas cosas u otras, siempre da mucho que hablar.

Después de mi carrera anterior en la carrera de Tres Cantos, ahí donde aún me pregunto por qué tu ve que salir a hacer el paripé después de lo que llevaba encima, se presentaba esta carrera, a la cual iba con ganas. Estuve toda la semana entrenando bien, siguiendo todas las pautas marcadas y con ganas de que llegara.

Pero la cosa empezó a torcerse el Viernes, sin yo casi sin darme cuenta. Resulta que desde antes la carrera de Tres Cantos, tengo una muela que me está dando guerra y una primera visita al dentista, me confirmo que tenía una infección y que había que hacer una endodoncia, pero como no me dolía nada por aquel entonces, decidí posponerlo para después de la carrera de Tres Cantos, para no tentar a la suerte por si se torcía algo. Primer error.

El caso es que desde el Viernes, me ha estado doliendo y mucho, con lo que el Paracetamol de 1 gramo en vena cada 8 horas, y aun así me seguía molestando, pero seguía siendo capaz de hacer los entrenos previstos. Segundo error.

Todo esto derivo en que desde el Viernes, por las noches pudiera dormir poco y mal por las consiguientes molestias, pero ahí seguía aguantando, por que por momentos no dolía nada y por momentos dolía horrores, pero ahí estaba Mr. Paracetamol para solucionarlo. (esto no es un error, es una consecuencia)

Total, que el domingo por la mañana, y más con el cambio de hora, a las 6am ya estaba en pie, con lo que me fui temprano a Mejorada, para llegar con tiempo, reconocer el circuito, rodar bien, calentar y cogerlo con ganas.

De hecho, me dio tanto tiempo, que me pude patear la zona de árboles antes de sacar la bici. Posteriormente, di 3 vueltas al circuito a rebufo de Diego Ramos, y la verdad no iba mal, pero claro, estaba calentando.

Y nada hacía presagiar el desastre que estaba tomando forma, de hecho en los minutos previos, estaba realmente relajado y confiado en mis posibilidades de hacerlo decente, así que una vez posicionado en la parrilla, ahí que estábamos dispuestos a dejarlo todo.

Se dio el pistoletazo de salida, y como en todo buen ciclocross que se precie, se sale a mil, esprintando y jugándote el tipo (algunos más que otros, yo ahora me conformo con estar en la parte media de esa locura), se llega a la primera curva a la izquierda para adentrarnos en el campo de futbol y hacer ese tramo (donde yo a veces perdía el norte), y a partir de ese momento, mis sensaciones eran horribles.



Lo que sentía era un ahogo tremendo, sentía que el corazón se me iba a salir por la boca, no me llegaba el aire, estaba que no sabía ni donde estaba. Me dije, que podía ser el arreon del principio, que mi arma era aguantar y luego ponerme a ritmo para intentar remontar. En eso momento debía de tener por detrás unos 14-16 corredores.

Pero es que no iba, me iban pasando todos, uno tras otro irremediablemente, tanto que cuando llegue a la zona de los arboles era el penúltimo, iba detrás de otro corredor, pero que metro a metro iba sacándome más distancia. Era pura impotencia.

Mi respiración no se relajaba, me faltaba el aire, las piernas me explotaban y la cabeza me decía que me bajara, que buscara cualquier excusa para hacerlo, pero me dije que no.

Así que las cuatro vueltas que di (me doblaron en la cuarta vuelta), solo miraba al suelo y al circuito, no oía ni veía nada de lo que había fuera de las cintas, porque me estaba moralmente viniendo abajo, pero tenía que aguantar como fuera.

Y así lo hice, termine el ultimo, de hecho la tercera y cuarta vuelta (esta última hasta que me doblaron), iba solo por el circuito, sin nadie por delante, sin nadie por detrás, podía tranquilamente saltarme trozos y nadie se habría dado cuenta, pero no lo hice.



Termine como pude, un tanto mareado la verdad, con falta de aire (como toda la carrera) y muy tocado, vamos que reconozco que me dicen algo y me echo a llorar, la decepción era tremenda, pero luego analizándolo te das cuenta, que lo de la muela, los antibióticos, el poco descanso y el frio pasa factura.

Porque para que os hagáis una idea, al ir con la boca abierta, me entraba aire frio (estábamos a 5 grados) y ese aire, me llega a esa muela que me está martirizando, y solo con ese aire frio, me dolía horrores, con lo que si ya de por si iba con sensación de ahogo, tenía que cerrar un poco más la boca para evitar ese aire frio.

Ya en casa, y pensándolo fríamente, quizá ni debería haber ido a correr, pero es lo que nos gusta y después del año tan difícil que en mi casa hemos tenido, pues no es plan de desaprovechar oportunidades. Y seguramente el jueves a Torrejón y el Domingo a Parla, me lo debería replantear ya que en medio justo (el viernes) tengo la endodoncia y a ver como acabo ese día, pero iré y que salga lo que tenga que salir (aunque solo sea en la foto).

Hoy ya lunes, y más tranquilo me lo tomo de descanso de entrenamientos, y cuando iba a la oficina, por la radio se me ha quedado una frase que han dicho, que en su momento dijo un tal Winston Churchill (seguro que os suena) que dice tal que así: "El éxito reside en tropezar de fracaso en fracaso sin perder el entusiasmo".



Ahí queda eso.

jueves, 18 de octubre de 2018

Carrera : Ciclocross de Tres Cantos (Madrid)

Carrera : CX de Tres Cantos
Lugar : Tres Cantos (Madrid)
Fecha : 13 de Octubre de 2018

Todo pasa factura



Este pasado sábado se disputaba la II Edición del Ciclocross de Tres Cantos, el cual, para bien o para mal, soy el organizador y responsable junto con mis compañeros del equipo Máster ALG Fisio y rendíamos homenaje a un gran ciclista y mejor persona : Luis Pasamontes.



No voy aquí a relatar la cantidad ingente de trabajo que supone organizar una carrera, pero ya os digo que es mucho y luego para el devenir de mi carrera, influyo y mucho.

Por este motivo, el año pasado no pude correr "en casa", más que nada porque el año pasado sí que fue un agobio tremendo, era el primer año y la carrera tenía que salir bien. Pero este año con la magnífica colaboración de mis compañeros, se hizo todo mejor y más rápido. Firmo ya que sea todos los años así.

El circuito que diseñe este año junto con Diego Ramos, era muchísimo más duro que el del año pasado, el cual mucha gente tildo de fácil y poco técnico, así que este año tocaba sufrir. Y creo que conseguimos tener un circuito equilibrado con subidas, bajadas, zona técnicas, zonas de abrir gas y zonas de intentar recuperar.....algo.

Yo ya estaba por la zona del circuito a las 6 de la mañana haciendo cosas sobre el mismo, así que mi condición física por el cansancio acumulado de los dos últimos días era muy pobre, pero quería salir si o si a correr, lo hacía en casa y además al equipo había que darle presencia en carrera.



Los minutos previos a la salida de mi manga, ya que corríamos en la segunda tanda a las 10:30 apenas pude calentar, es más, no pude calentar nada, así que cuando comenzaron a llamar a los corredores, directamente me coloque de los últimos, ya que ni tenía ganas de luchar por un buen puesto de parrilla. Así que estaba en la última línea de salida.

Se dio el pistoletazo de salida, y salimos como no, a todo trapo. Yo comencé el sprint de menos a más, incluso en la primera curva, la gente frenaba para trazarla por dentro mientras que yo arriesgue por fuera y adelante a unos cuantos, al igual que en las primeras curvas del recorrido. Ya en la subida primera de "las raíces" no iba mal, estábamos todos en un relativo puño y pretendía ir de menos a más. Nadie se conocía el circuito tan bien como yo y sabía que este era un circuito de fondo.

Pero cuando llego la subida después de boxes, me vine abajo de repente, ni una sola vuelta dure en condiciones. Los muslos los tenía como piedras e incluso la pierna derecha con amago de calambres y el pulso lo tenía por las nubes. No era capaz de tener un mínimo ritmo, aunque era lo que esperado. Así que me hice a la derecha y me empezó a pasar bastante gente, unos 14 conté.



Ya al pasar por meta por primera vez, mi cara era todo un poema pero tenía que acabar si o si, y me daba igual el puesto, así que seguí con el ritmo que pudiera llevar y punto.

Finalmente en la cuarta vuelta (se daban cinco), sabía que tenía 3 o 4 por detrás y muuuuuuchos por delante, y tb sabía que me iban a doblar, de hecho lo estaba deseando, así que a mitad de la cuarta vuelta, los 8 primeros me pasaron con mucho gas y termine la carrera en la cuarta vuelta, con el motor sin gasolina, con la junta de la trócola reventada y las patas más duras que dos palos.  Pero muy contento. Creo que a pesar de todo, salir ya era un triunfo.



Ya después de todo el jaleo de recogerlo todo y la entrega de premios, donde disfrutamos todos, toca descansar 2 o 3 días, y a pensar en las 10 carreras de CX que quedan en Madrid, que espero que todo el año de sus frutos haciendo buenas carreras (ojo, de sensaciones, porque de puestos, se ha puesto en Máster-40 muy pero que muy difícil) y a pensar en 2019.

Que por cierto, me llueven los comentarios positivos del circuito y que no cambiemos nada para el año que viene. Solo me quedar agradecer a todo el mundo que vino a correr y decirles dos cosas : la primera que ya tenemos apalabrado el homenajeado para el año que viene y segundo, el circuito visto el éxito de este año será muy similar, cambiaremos alguna cosilla, quitaremos alguna y añadiremos alguna otra. Solo digo, que le tengo echado el ojo a otro par de repechos..........jejejeje.

Nos vemos en la próxima.

Salu2