domingo, 28 de diciembre de 2014

Carrera : Ciclocross de El Escorial

Carrera: CX de El Escorial
Lugar:  El Escorial (Madrid)
Fecha: 20 de Diciembre de 2014

La cuestión era salir y volver a competir.

El pasado sábado 20 de Diciembre, me lie la manta la cabeza y me presente en la carrera de ciclocrós de El Escorial, aunque costo lo suyo, ya que mi nueva situación familiar reciente, había entrenado lo que se dice poco, poco…………pero lo que quería era volver a ponerme un dorsal, volver a correr y que formara parte de mi comienzo de pretemporada de cara al 2015. Aparte, y no nos vamos a llevar a engaños, volver a marcar el territorio en casa……..jejejeje, ya que después de casi 4 meses sin correr, se podría tomar como una nueva costumbre en casa y no es plan.

Mi carrera empezó dos o tres días antes, cuando había que comenzar a preparar el terreno en casa así como planificarlo todo bien para que no haya problemas ese día. Y la noche anterior, con la ropa preparada y la bici metida en el coche.

Ya el día de autos, levantarse pronto para dejar la casa colocada, los desayunos preparados y salir pitando de casa, antes que algún enano se levantara y la fastidiáramos.

Después de salir de casa y llegar pronto a El Escorial, me dio tiempo a recoger mi dorsal con calma y dar un par de vueltas al circuito para ver, que es muy similar al de años anteriores, aunque como todos los años, con novedades. Y de paso, saludar a buenos amigos que estaban por allí.

Ya cuando terminaron de correr los master-30, ya que por cierto, ya soy Master-40 (la edad no perdona), me plantee el dilema de si correr de largo, con perneras, con guantes, sin guantes,etc……..al final, con perneras cortas y con guantes de lana, al final una mala opción, ya que ambas cosas, me sobraban a los 5 minutos.

Se dio la salida, y yo situado al final de la parrilla, el última fila, lo esperado y lo lógico, mi idea era salir y ver qué tal, sin aspiraciones de ningún tipo. En el sprint inicial, pase a algunos corredores,  pero rápidamente me di cuenta que eso era un espejismo. Así que pronto me dedique a hacer mi carrera, intentando dar lo mejor pero al haber entrenado tan poco era cuestión de tiempo que me doblaran.

Plano del circuito de CX El Escorial






Además, como mencione antes, las perneras empezaron a bajarse con lo que me empezaron a molestar y a cada poco, tenía que subirlas. Mientras tanto, las vueltas iban pasando a mi ritmo y mi buen amigo David Alonso, me hacia fantásticas fotos (cada año mejor). Ya en la cuarta vuelta, después de haberme marcado mi ritmo, y al pasar el tramo de escaleras, me pare incluso para colocarme bien las perneras (hasta ese punto iba a mi ritmo), mientras que a lo lejos ya se vislumbraban los primeros de Master-40 (Daniel Lorca y Julián Adrada), los cuales, deje pasar tratando de molestar lo menos posible, ellos se jugaban la carrera, yo absolutamente nada.

Entrada en meta.

Al ser doblado, solo tuve que dar 4 de las 5 vueltas programadas, así que al pasar por meta se dio por concluida mi carrera. Satisfecho porque había salido a competir y volver a ponerme un dorsal otra vez, ahora de aquí hacia arriba en los próximos meses. Tratar de buscar la regularidad, el método, perder peso y con la ilusión de haberle dado además, una vuelta completa como un calcetín al equipo, con sponsors nuevos (dejando atrás para siempre a Ciclo Speed), nuevos corredores y nuevas ilusiones.


Empieza el 2015.

miércoles, 15 de octubre de 2014

Historia de una Bici

Había una vez hace 30 años, un niño llamado Sergio. Apenas tenía 9 años de edad pero ya disfrutaba en el pueblo de sus abuelos, situado en Sanabria y de nombre Sampil de los placeres, la aventura, las sensaciones de montar en bici a lomos de su motoreta de color rojo.

Por aquella época, su tío Domi aún estaba soltero y cuando iba a pasar unos días allí, compartía habitación con su único sobrino. Aquel verano, Domi se compro una bicicleta hecha a medida en la mítica tienda madrileña Otero, una Razesa de la época que costó cerca de 50.000 de las antiguas pesetas, lo que se dice un bicicletón de la época.

La bicicleta en cuestión.

Dicha bicicleta, su tío Domi se la llevo al pueblo para hacer algunos kilómetros por “las cuestas de la zona”, pero no se imaginaba que su sobrino Sergio se quedó prendado de esta bicicleta al instante. Domi, que era muy suyo para sus cosas, le prohibió tajantemente coger la bici nueva, ya que esta se podría romper con casi mirarla.

Mis primeros pinitos junto a mi tio Domi.

Pero eso no fue impedimento para el niño de 9 años, ya que o bien madrugaba o aprovechaba las siestas de su tío para cogerle la bici a escondidas y salir por la carretera del pueblo hacia la Escuela, la majada o el alto de la Jomba, apenas un puñado de kilómetros, pero que a ese niño le parecían auténticas etapas del Tour. Y todo esto, deprisa y corriendo para volver a dejar la bici de nuevo en su sitio, en la misma posición en la que estaba para que su tío Domi no se diera cuenta.

Casi 30 años después, Sergio ya es mayor y la bicicleta supone para él una forma de vida, hacer carreras, tener un equipo, ir a hacer puertos a los Alpes o a los Pirineos, etc…..y veía como su tío aún seguía conservando y utilizando su bicicleta Razesa de Otero. La cual, desde hace un tiempo trataba de convencer a su tío para que se comprara otra bici más moderna y que esa bici, se la vendiera para tener una “bici retro”.

30 años despues del comienzo de esta historia.

Pues bien, apenas hace 10 días, su tío Domi falleció a la edad de 58 años por una embolia pulmonar, justo después de hacer algunos kilómetros por el carril bici de Tres Cantos a lomos de su bici de 30 años.  Un duro golpe para su mujer, sus hijas, su madre, hermana y demás familiares, ya que estaba en la plenitud de su vida.

Lamentablemente, he heredado por expreso deseo de su mujer, es decir, mi tía, la vieja bici de mi tío Domi, la cual está ahora en mi poder, algo que quería tener pero jamás de esta manera tan cruel.


Esta bici la voy a restaurar, limpiar y reparar para quizá usarla en alguna marcha retro, en honor a mi tío y para decirle “Gracias” por que hace 30 años al prohibirme montar en tu bici, hiciste que descubriera un deporte maravilloso a lomos de una bici fantástica. 

Estés donde estés: gracias Domi.

martes, 9 de septiembre de 2014

Carrera: Criterium de Alcorcon

Carrera : Criterium de Alcorcon
Lugar : Alcorcon (Madrid)
Fecha : 31 de Agosto de 2014

 
Sobre todo buena suerte.

 

Este pasado Domingo, 31 de agosto se disputo el I Critérium de Alcorcón organizado por la PC Ondarreta, y la verdad es que no han podido tener un estreno mejor.

En mi opinión, un circuito francamente bueno, aunque como todos con un par de detalles a pulir, ancho en su mayoría y con un asfalto perfecto, con apenas peligro en las curvas y es que en esta clase de circuitos, debe imperar sobre todo la seguridad del corredor.

Pero lo dicho, una carrera magnifica en su estreno, esperemos que se consolide en el calendario madrileño. Y ojo, lo más importante era la hora, al menos para mí, ya que empezar a las 9 y a las 11 estar de camino a casa, es una bendición para liberar de cargas deportivas a la familia.

Por otro lado, me presente en línea de salida bien prontito como en mi es habitual, y después que en los 75 días anteriores haya entrenado mucho y con mucha regularidad (cerca del 90% de los días) y con casi 5.000 kms en las piernas, pero claro, una cosa es entrenar, subir puertos y tragar kilómetros, y otra muy distinta es competir, ya que los cambios de ritmo, acelerones y demás no lo consigues entrenando.

El día amaneció con buena temperatura, además, saliendo a las 9 nos librábamos del calor que aprieta en Madrid a partir de las 12 de la mañana. No sé cuántos corredores seriamos en línea de salida, pero superábamos ampliamente los 120, con lo que el pelotón era notable, aparte que había mucho gallo allí dispuesto a afrontar la parte final de su preparación de cara al campeonato de España de la categoría, que se celebra el siguiente fin de semana en Murcia, y claro, tenían que estar presentes si o sí.

Por mi parte, estaba harto de entrenar y necesitaba competir, ponerme un dorsal, así que me presente con toda la ilusión del mundo de al menos, intentar estar delante. Pero como siempre, la realidad se impone.

Se dio puntualmente la salida de la carrera, donde al circuito de 5,2 kms teníamos que dar 12 vueltas y por supuesto a mil por hora. Decir, que hacíamos el recorrido en sentido contrario a las agujas del reloj, y cuando íbamos del “30 al 1” nos daba el viento de cara, pero sim embargo, del “60 al 30” nos daba de espaldas y además, en un poco de bajada y la parte final en una gran avenida de tres carriles, con lo que en ese tramo se volaba.

Como es habitual en esta clase de circuitos, muchas veces es más importante la colocación que las fuerzas que uno tenga, ya que metido en el paquete se puede ir relativamente cómodo.

Las primeras vueltas, a fuego. De hecho creo recordar que en la segunda vuelta se formó una fuga de 5 corredores que duro apenas vuelta y media, mientras que por detrás, a ritmo infernal. Pero lo que paso en la vuelta 4, afecto a buena parte del pelotón.

Estábamos empezando la vuelta número 5 y después de pasar las dos primeras curvas y estar en la recta estrecha del principio, se formó una montonera de 8-10 corredores, que nos puso a todos con las orejas tiesas.

La caída ocurrió en la primera mitad del pelotón, con lo que se cortó en mil pedazos. Por mi parte, la montonera ocurrió justo delante de mí, de hecho la atravesé por el medio como pude, manteniendo el equilibrio, apoyándome en otro corredor que se fue al suelo, empujando con la rueda delantera una bici del suelo y dando un salto con la bici para esquivar a un tío en el suelo delante de mi trayectoria. Una odisea, parece que el CX no viene mal para estas cosas.

Después de esto, veo que la parte delantera del pelotón está ahí, acelero y consigo entrar siendo consciente, que el corte estaba hecho, que todos los afectados por la caída y los que estaban detrás estaban fuera.

Pero yo también estaba fuera, me di cuenta que el desviador del piñón estaba totalmente doblado (se llevaría algún golpe en la montonera) así que pare rápidamente, lo enderece con la mano (con el riesgo de quedarme con él en la mano al partir la patilla del cambio) y volví arrancar, pero claro, esos 20-25 segundos con el pelotón a mil, se me fue por completo y fue imposible de recuperar. Se había acabado la carrera para mí.

A partir de ahí, intente de todas formas tratar de enlazar, por si acaso había un parón por delante, así que me pase dos vueltas persiguiendo, cogiendo a gente y haciendo grupeta, pero luego desistí por completo.

El pelotón iba creciendo, e íbamos cogiendo más y más gente hasta consolidar un segundo pelotón de cerca 30 unidades, que algunos a relevos, otros a ruedas iba consumiendo vueltas. Yo al menos, me lo tome con un entreno de calidad y esperar que pasaran las vueltas.

Pero como siempre pasa, y no lo entenderé jamás, un montón de gente que iba a rueda todas las vueltas anteriores, en la última vuelta empieza a pasar y a pelear por la posición para un sprint por el puesto sesenta y nueve como poco. De hecho, así paso que en la última curva hubo caída de un par de corredores. En vez de llegar tranquilos, allí todo el mundo esprintando.
 
Por mi parte, no quise saber nada del asunto y entre de los últimos en el pelotón con una media de 40 km/h. Luego, como siempre, recoger los bártulos y salir a toda prisa.

Por cierto, gano el Puma del equipo Orquin, seguido de Antonio Martin “Pispajo” de Esteve, que por lo visto arrancaron en plan Bontempi a 1 km de meta y se jugaron la victoria al sprint. Suerte a ambos en Murcia.

En resumen, me puedo dar con un canto en los dientes por haber librado la caída ya que la vi, muy pero que muy cerca, pero por otro lado, me da rabia ya que me sentía bien y de hecho en las cuatro vueltas anteriores a la caída, procuraba estar siempre delante en las 20 primeras posiciones para evitar precisamente eso, y en un momento que pierdes las posición……………..te quedas cortado y afectado por una caída.

Una lástima, tenía muchas ganas y fuerzas suficientes para al menos estar en el pelotón principal. Pero como he dicho, buena suerte y mala suerte en la misma carrera. Me quedo con la buena suerte.

La próxima carrera será Fuenlabrada y luego Ciempozuelos, veremos si puedo ir. Intención hay, pero como ya se sabe, donde hay patrón no manda marinero…………..

Hasta la próxima.


 

miércoles, 4 de junio de 2014

Carrera : Trofeo de Torrejón de Ardoz

Carrera : Trofeo de Torrejón de Ardoz
Lugar : Torrejón de Ardoz (Madrid)
Fecha : 01 de Junio de 2014

Se escapo el caballo por los pelos.




Este pasado Domingo, 1 de Junio se disputo el primer Trofeo de Torrejón de Ardoz, sobre un circuito de 4,2 Kilómetros en forma de gran T.

Circuito para mi gusto muy bueno, grandes avenidas, buen asfalto y si apenas peligros, excepto en una cosa, la meta está demasiado cerca de la última rotonda, y si quieres hacer algo en carrera, te juegas el físico, al igual que en la carrera del Pavo de Ciempozuelos para que nos entendamos. Como, desgraciadamente o afortunadamente, según se mire, no es mi caso, el circuito está perfecto.
Buena iniciativa del Club Ciclista Colmenar en meter una carrera primero con los Máster y luego con las Escuelas, esperemos que esto cunda y que en todas las carreras de circuito, al terminas nosotros, tengan su oportunidad los chavalitos.
El día empezó con el típico madrugón, para dejarlo todo bien atado en casa, y llegar pronto a la Pizzería Di Carlo que estaba justo enfrente de la salida, lo que me dio oportunidad de aparcar muy cerca de la salida. Buena posición para después, al terminar, guardar los trastos y de nuevo y como siempre, salir pitando para casa.
Como decía anteriormente, el circuito no tenia gran dificultad, era como una gran T mayúscula, donde en la mayor recta de todas, soplaba el viento de cara, allí donde cualquier aventura en solitario moría por su propio peso. O eso al menos decía la teoría, después de ver que ocurría eso en la primera manga de los Máster-40-50-60, que salvo un arreon final que hizo que llegaran 4-5 corredores a disputarse la victoria, el resto, todos juntos y muy enfilados.
Por cierto, gano Pedro Díaz Lobato de Ciclos Corredor desde hace una semana, seguido muy de cerca por mi excompañero en Berrendero Manuel Cervantes, enhorabuena a los dos.
Manga en la que también se cayó mi compañero de equipo Forrest Murphy y que afortunadamente se ha quedado todo en chapa y pintura. Pero que además, mi compañero de equipo Miguel Ángel García “Coleta”, vuelve a recuperar el maillot de líder en Máster-60. Enhorabuena campeón.
Después nos tocaba a los Máster-30, dar 12 vueltas al circuito de 4,2 Kms para completar los 50 kms de la carrera.  Calculo que en línea de salida estaríamos unos 50-60 corredores, de los cuales, cuatro éramos Ciclo Speed (Jorge Calvo, Víctor Taborcia, José Río y yo mismo).
Y como viene siendo habitual, se da el pitido de salida y allí que salimos esprintando como alma que lleva el diablo. Creo que el primero que arrancó fue un Ac Marriott, y poco después otros 3-4 corredores, y poco después otros tantos y así hasta que al finalizar la primera vuelta, se formó una fuga de 14 corredores, entre los que estaban Alberto Sánchez (Oposur), Iván Martínez (Salchi) o Jesús Ruíz (Ac Marriott). Es decir, una fuga que podría valer y de hecho cuajo.
Yo en cuanto vi la gente de peso que iba en la fuga, tuve claro que había que ir a por ellos o arrancar para tratar de enlazar cuanto antes. Esa era la fuga buena.
Por detrás, en el transcurso de la segunda vuelta no parecía que nadie tuviera ganas de coger la responsabilidad y nadie arrancaba con el suficiente convencimiento para ir a por ellos, así que en la última rotonda del circuito, cuando el viento daba a favor, arranque con todo a por ellos para tratar de entrar en la escapada.
De camino pasé a 3-4 corredores que iban de por medio y que se quedaron en tierra de nadie, uno de ellos mi excompañero en Berrendero Daniel Martínez. Llegue a la última rotonda del circuito, justo antes de meta, a apenas 10 metros de la escapada y sacando cerca de 50-60 metros al paquete. Lo tenía ahí.
Y en tramo final que soplaba el viento a favor llegue a quedarme a apenas 5 metros de ellos, pero me empezaron a faltar las fuerzas. De repente, me paso Daniel Martínez (Esteve) como una flecha, recuperándose del sofocón de antes y haciendo un tremendo esfuerzo por enlazar. Yo trate de coger su rueda pero me fue imposible. Él se engancho a la fuga justo en la rotonda donde cambiábamos de dirección y tendríamos el viento de cara. Él tuvo la suerte de meterse en ese grupo (que ahora eran 15 escapados) y yo tuve la mala suerte de encarar ese tramo solo y ahí se acabó mi aventura.  Vi como irremisiblemente se me escapaban y se me esfumaba la posibilidad de entrar en la fuga buena con los buenos. Una verdadera lástima. Y todo eso sin haber terminado si quiera la tercera vuelta al circuito. Aún quedaban 9 más.




Visto lo visto, decidí levantar el pie y esperar al pelotón que venía por detrás, me cogieron rápidamente y me puse en medio del paquete donde se iba muy cómodo. Y así hasta el final.
Ya las vueltas fueron cayendo una tras otra, mientras que la fuga vuelta a vuelta iba cogiendo más ventaja, por detrás, cada uno hacia la guerra por su cuenta. No todos, ya que muchos simplemente nos dedicamos a ir en el pelotón, para ir dejando caer las vueltas hasta el final, sabiendo que la carrera se nos había ido por delante.


Ya en la vuelta final, los típicos nervios por hacer el puesto décimo sexto (en el mejor de los casos, iban 15 tíos por delante), hicieron que uno que iba delante de mí, hiciera un quiebro y se engancho mi rueda delantera con su cierre de la rueda trasera. Y adiós radio. Pero la rueda aguanto bien hasta el final. La gente como loca esprintando por ese tan codiciado 16º puesto y yo atrás del todo,  a veces charlando con otros corredores, viendo desde detrás la pelea y entrando cómodamente en meta.
Acabe muy contento de mis prestaciones en la carrera, lo intente, vi la jugada de la fuga y quizá reaccione un poco tarde, pero ahí que lo tuve. Me faltaron 5 metros y es una pena, pero bueno, el viento también influye en las carreras, las fuerzas o es que hay que entrenar un poco más. Pero contento.
Ahora, a esperar la carrera de Coslada el próximo sábado por la tarde, donde parece que nos espera un circuito durísimo.
Hasta la próxima.

Carrera : Trofeo de Fuenlabrada

Carrera : Trofeo de Fuenlabrada
Lugar : Fuenlabrada (Madrid)
Fecha : 18 de Mayo de 2014

Trabajando para un amigo.


Hace dos semanas, se disputo la tradicional Trofeo de Primavera de Fuenlabrada,  sobre el ya circuito tradicional salvo que esta vez, tocaba hacer el circuito largo que subía a la M-45.
Después de dejarlo todo atado y bien atado en casa, me presente bien pronto en el lugar de la salida, para hacer formalizar la inscripción con calma y sin agobios, aparte para poder aparcar el coche en un buen sitio para en cuanto terminara la carrera, salir pitando para casa.
Todo se cumplió según el plan previsto. Ya la carrera empezó a casi las 9 en punto, lo que no deja de ser extraño en la categoría. El sol lucía esplendido y sería un día de mucho calor, aunque los jueces hicieran de las suyas, para variar. Esta vez con el tema de las mangas para los Master-50 y Master-60.
Mi equipo (Team Ciclo Speed), teníamos muy claro que íbamos a echarle un mano al “Coleta” para mantener una carrera más el maillot blanco que le acredita como líder en Máster-50 en el Trofeo Federación de Madrid, y para ello hablamos antes de la carrera que íbamos a estar atentos suponiendo que íbamos a salir todos juntos. Pero no fue así.
Primero salíamos los Senior, Master30 y Master 40, y para que luego en la tercera vuelta salieran los más veteranos. Hasta aquí nada nuevo, pero el caso es que dieron la salida a estos corredores, justo cuanto los demás, estábamos en la otra punta del circuito, es decir, en ningún momento nos íbamos a juntar en un solo pelotón, era como tener dos carreras sobre el mismo circuito.
Pero antes que eso, tocaba salir primero nosotros, y como siempre, se salió a mil por hora. Yo lo tenía muy claro, al igual que mis compañeros Víctor y José. Mientras que Jorge Calvo, Enrique Gutiérrez y el “Narko”, intentarían algo por delante.
Así que las dos primeras vueltas, íbamos los tres atrás del todo, aguantando el látigo de los que por delante, intentaban hacer algo en carrera.
Ya en la tercera vuelta, viendo lo que habían hecho los jueces, nos quedamos los tres a esperar al coleta, marchando a un ritmo más lento que el pelotón principal, eso además, nos hizo ser testigos de excepción de la montonera que se formó en la cuarta vuelta en la subida a la M-50. El primer pensamiento que tuvimos fue de la que nos habíamos librado, ya que fue en la parte trasera del pelotón.
Mientras tanto, íbamos mirando para atrás esperando al pelotón del Coleta, donde ya estaba mi compañero José echándole una mano. El que nos alcanzaran les llevo casi 2 vueltas, es decir, faltaban 5 vuelta para terminar la carrera.
Nada más cogernos, nos pusimos los tres manos a la obra y de ahí hasta el final, fuimos tirando de ese pelotón, primero para tratar de coger a un par de Master-50 que iban por delante, segundo para que nadie más de los Master-50 tratara de sorprender a Miguel y tercero, para dejarle lo más cerca posible de la meta de cara al sprint y puntuar bien de cara a la general.


No acabamos muy contentos, ya que no cogimos a los dos que iban escapados y en el sprint, se nos escapó en maillot blanco por dos puntos. Pero seguimos ahí y seguiremos dando guerra.
Por mi parte, acabe contento con mi rendimiento. Creo que podría haber acabado con el pelotón principal sin problemas, pero era más importante sacrificar las (nulas) opciones de hacer algo por un compañero, ya que para nosotros un liderato tiene mucho valor moral y de imagen.
La próxima carrera en Torrejón, donde ya veremos qué pasa.
Hasta la próxima.

martes, 18 de marzo de 2014

Carrera : GP Bike Illescas

Carrera : Trofeo de Illescas
Lugar : Illescas (Toledo)
Fecha : 16 de Marzo de 2014

Moto GP en bici.

Este pasado Domingo, 16 de Marzo se disputo le Primero Trofeo Bici GP de Illescas, o también llamado I Trofeo Cerveceria XXXXXX de Illescas, sobre una distancia inicial de casi 100 kilómetros a un circuito de carretera de casi 25 kilómetros, pasando por las localidades de Carranque, Cedillo del Condado, Yuncos y de nuevo Illescas.

Esa mañana había quedado con mi amigo, vecino y excompañero de equipo en Berrendero y en Ciclo Speed, Jose Luis Sanz, para ir juntos desde casa hasta Illescas, un traslado comodo de apenas 40 minutos, ya que Illescas, como quien dice esta aquí al lado.

Llegamos prontito, poco antes de las 9 de la mañana y casualidades de la vida, en la entrega de dorsales, me toco el numero 76, el mismo que tengo este año en el Trofeo Federación de Madrid. Una vez tramitada las inscripciones nos dio tiempo a prepararnos con tranquilidad y salir a calentar, cada cual con su propio equipo como es lógico y viendo con mi compañero Victor Taborcia, el “pedazo” de repecho final que hay de cara a meta.

Es decir, carrera totalmente llana, donde saldríamos 200 corredores juntos y era mas que probable que llegaramos 250. Se dio la salida puntualmente 10’ minutos después sobre el horario previsto, y salimos a mil por hora, sprintando de salida y aquello parecía una salida de ciclocross en vez de una de carretera. Rapidamente los equipos punteros tomaron el control y allí no se movia nadie, pero eso si, ataques muchos tratando de romper la carrera, pero sobre todo Orquin y Oposur tratando de controlar la carrera, este ultimo equipo para su hombre rápido Alberto Sanchez.

Yo iba metido en la panza del paquete tratando de sobrevivir, no por el hecho de ir rápido, ya que podía mantener el ritmo sin problema, sino mas bien por la lucha que hay dentro del pelotón por ganar medio metro. Todo el mundo quiere estar delante, yo incluido, asi que el ratonear sobre todo por los arcenes, con el riesgo que supone de pinchazo, bache o montonera en la cuneta esta al orden del día, pero vamos, no menos que ir metido por el medio del pelotón con toques de brazos, frenazos o afiladores.

Pero aquello era un infierno, ya de por si la velocidad era altísima, de hecho la primera vuelta la hicimos a casi 45 de media, sino que el esfuerzo que había que realizar para ganar posiciones era brutal, si a eso le añadimos la cantidad de rotondas que había, los baches, los frenazos y demás, aquello como he dicho antes era una carrera de supervivencia y tratar de no caerse. De hecho, en la primera vuelta, al paso por la localidad de El Viso de San Juan, iba metido en la mitad del paquete en medio de la calzada, hubo un frenazo por delante y tuvimos que frenar, el que iba detrás de mi hizo el afilador conmigo y se fue al suelo, provocando la consiguiente montonera. No me pare a mirarlo, pero note perfectamente el afilador en la rueda trasera y escuche el consiguiente golpe de los que se fueron al suelo.

Habia que estar rápido, ya que alguien empezó a gritar que había que corte en el paquete y que se apretara para que se cortara en dos el pelotón. En mi opinión un gesto muy feo, una cosa es que se siga al mismo ritmo (de hecho, estoy convencido que todos los que iban por delante ni se enteraron de la caída) y otra cosa muy distinta es además, decir que hay que apretar mas para quitarte a medio pelotón de encima. Yo desde luego, no haría eso nunca.

El caso es que aquello se acelero, pero a los pocos kilómetros, el medio pelotón que iba por detrás que se quedo cortado, se volvió a enganchar sin problemas y allí seguimos todos apelotonados y a veces encunetados. En una de esas ocasiones, no entiendo a la gente, vamos ahí casi en fila de dos pegados al arcen de la izquierda y alguno viene por detrás, pidiendo paso por la izquierda. ¿Qué es lo que pretende?. ¿Qué pierda yo la estela del paquete para que pase el?. Vamos, ni hablar. Eso le decía al Ciclos Corredor que iba a mi lado y que le estaban gritando desde detrás un AC Marriott para que se apartara. Le decía, que ni se moviera, y que pasara cuando hubiera hueco o que pudiera, pero quitarnos nosotros para que pase el, vamos, ni de coña.


Esto paso en la segunda vuelta, poco antes de que la carrera se neutralizara. Los jueces, con buen criterio, decidieron parar la carrera, dado que las dos ambulancias habían tenido que evacuar a varios corredores implicados en alguna caída, y la seguridad es lo primero. Asi que a la entrada de Yuncos, se paro por completo el pelotón, lo que aprovechamos algunos para hacermos alguna foto en carrera y no como algún inconsciente que se dedica hacer fotos en plena marcha. Algo que por cierto, esta totalmente prohibido y es muy peligroso por la integridad de los corredores que le rodean, pero vamos, como hay muchos que le rien la gracia, asi seguirá haciendo fotos, hasta que un dia la lie y gorda, entonces nos echaremos todos las manos a la cabeza.

Durante el paron, yo estaba prácticamente convencido que la carrera se suspendia, pero afortunadamente, la carrera se reanudo al poco, aunque decidieron recortar el recorrido, quitando la cuarta vuelta. Es decir, teníamos que completar los apenas 8 kms que quedaban hasta Illescas y luego otra vuelta más.

Pues nada, vuelta a empezar, los primeros 42 kms no habían valido para nada, y los 32 restantes había que dar el resto. Se salió igual como se terminó, a toda pastilla. Aquí creo que la organización cometió un error, ya que apenas quedaba 1 kilómetro para hacer un giro de más de 90ª hacia la izquierda antes de encarar el tramo recto final hacia Illescas y empezar la tercera vuelta. No habría costado nada, hacer salida neutralizada ese kilometro y evitamos sustos en esa curva, pero no, todos esprintando de salida y sacando la rodilla para tomar esa curva.


Lo que quedaba de vuelta, poco más dio de sí. Al paso por Illescas, de nuevo comenzó la locura, a tope esos 25 kilómetros finales. Mi idea era ir remontando poco a poco, estar por ahí delante, a ver qué pasaba, si se hacía alguna fuga para estar atento, llegábamos juntos, arrancaba o simplemente ahí delante para evitar sustos en forma de caídas. Ya lo iríamos viendo.

Pero claro, remontar allí es tarea difícil, ya que a poco que dejes de pedalear un momento o dejes un hueco, se te cuelan por todos lados y de nuevo te vuelves para atrás, vamos que allí defender la plaza en el paquete te costaba uñas, dientes y codazos. Yo procuraba ir adelantando siempre por el arcén derecho, por eso de que por ese lado no hay coches aparcados en la carretera que vengan de frente, que son un auténtico peligro cuando están por la izquierda, pero claro, una cosa son las intenciones y otra la realidad, ya que luego solo pasas por donde quieres.

El caso es que poco a poco, con mucho esfuerzo y ratoneando lo suyo, aprovechando algún parón o rotonda, fui acercándome a la cabeza. Me encontraba bien de piernas y de cabeza. No pensaba arrancar por arrancar, porque a esa velocidad si ya es difícil salir, mantenerlo durante varios kilómetros es un esfuerzo titánico.  Y de piernas, ni rastro de calambres que era uno de mis miedos al haber estado moviendo tanto rato tanto desarrollo pero nada de nada.

Así que cuando llegamos de nuevo a Yuncos, estaba entre los 15 primeros por ahí afilando el cuchillo.  Giramos es esa última curva para afrontar la recta de Illescas, de casi 7 kilómetros. Se veía el pueblo al fondo y en esa recta había unas cuantas rotondas. Entramos a mil en esa curva, yo entre por fuera para ganar de nuevo alguna posición que había perdido en la frenada. De repente hay parón.  Los Orquin de repente dejan de tirar y los Oposur miran a otro lado, así que ni me lo pensé. Arranque con todo por la derecha. Veía delante otros 3 escapados que habían saltado poco antes de esa curva.

No sé a qué velocidad iría, pero yo no daba más. Alcance a esos 3 escapados, había un Oposur claramente a rueda para proteger a su esprínter Alberto Sánchez y otros dos del mismo equipo que ni me fije bien en el nombre. Rápidamente miro para atrás y en el pelotón que está a unos 100 metros nadie se mueve. Pues nada, agacho la cabeza y a darle más caña. Empezamos a dar relevos todos menos el Oposur y apenas un par de minutos después miro para atrás y ya viene el pelotón a tope. Los tenemos a apenas 20 metros.

Se había acabado la aventura, nos había durado apenas 1 kilómetro. Apenas quedaban 3-4 kilómetros para meta, así que fui levantando el pie y dejando que todo el mundo me adelantara para irme a la parte trasera del pelotón, ya que no quería meterme en el fregado de la llegada. Ya en el repecho final, que estaba a apenas 1 kilómetro de meta, me suelto del todo para entrar tranquilo  y recuperando.

En esas me grita Paco Corredor desde su coche que viene mi compañero el Coleta descolgado con Ángel tirando de él. Y me pongo a esperarles, quizá en Master-50 rasquemos algo, así que finalmente entramos los tres entrando a relevos para ver si caía algo. Creo que al final 2º o 3º en Master-50.

Luego, a recoger los bártulos, salir pitando con el Gordo en su coche y a las 13:30 en casa, para ducharse corriendo e ir a buscar a mi mujer, mis hijos y mis suegros para comer fuera. Y claro, con una sonrisa de oreja a oreja, sin dolor de patas, sin cansancio.

Mis sensaciones, muy buenas. No sabía cómo me iban a responder las piernas del esfuerzo del día anterior, aunque hay que reconocer que la carrera era fácil de ir en el paquete, la mayor dificultad era no tener problemas de caídas o similares, por lo demás, a rueda del paquete se iba bien, pero me quedo con que me aguante las ganas de arrancar en las primeras vueltas y trate de hacer un solo ataque y que fuera el bueno. Vi la oportunidad a 6-7 de meta y lo intente. No prosperó, pero mi intento ahí queda. Había fuerzas, había ganas y la mente clara.

Ahora dos semanas sin carreras hasta la de El Molar en Madrid que nos meterán con los Elite el día 29 y al día siguiente la carrera de Bargas. Muy similar a esta de Illescas aunque con un par de repechos más duros que harán la selección final pero que se puede superar. Veremos, hasta entonces a entrenar.

Hasta la próxima.

lunes, 17 de marzo de 2014

Carrera : TFM Daganzo

Carrera : Trofeo Inauguración TFM
Lugar : Daganzo (Madrid)
Fecha : 15 de Marzo de 2014

La primera de la temporada.................


Este pasado Sábado, 15 de Marzo de 2014 dio comienzo el Trofeo Federación de Madrid de carreras ciclistas en categoría Master, concretamente en la localidad madrileña de Daganzo, donde la Federación Madrileña organizo la carrera inaugural.
Dicho sea de paso, también comenzaba mi temporada de carreras en este 2014, que con un poco de suerte, espero que de Marzo a Septiembre sea mucho más prolífico y con más presencia que en el 2013, donde apenas corrí en 3 carreras (Talavera la Nueva, Vuelta a Aragón y Fuenlabrada).
La planificación y el calendario de carreras están ahí, luego que se pueda o no se pueda ya se irá viendo semana a semana prácticamente.
Bien, la carrera constaba de un circuito en carretera de 12 kilómetros, que salía de Daganzo para ir a Cobeña, luego a Ajalvir y de nuevo a Daganzo. Constaba de 3 subidas, el primero a la salida del mismo Daganzo de casi 2 kilómetros, el segundo a la salida de Cobeña que constaba de apenas 1 kilómetro y el tercero por medio de Ajalvir de unos 300 metros.
Era una carrera muy nerviosa, ya que sobre todo en el segmento Daganzo-Cobeña-Ajalvir, tenías las tres subidas con sus correspondientes bajadas, prácticamente seguido y se hacía difícil recuperar. Además, el hecho que se saliera a balón parado y directamente empezando a subir, a mí por lo menos, no me ayudaba mucho, ya que necesito unos minutillos para entrar en calor.
Ya por la mañana, me presente allí bien prontito, ya que al correr primero los cadetes (10 am) y luego nosotros (11:30 am) pensaba que ir con tiempo para tramitar la inscripción y repartir los dorsales a los de mi equipo, me podría dar tiempo a darme una vuelta al circuito antes de empezar a correr, ya que esta zona la tengo muy poco trillada. Pero al final, entre jueces y otras cosas, no pude tramitar la inscripción hasta las 10 con lo que ya, rodar un poco en la primera subida con mi compañero Víctor y poco más.
La salida, se dio casi puntualmente, como comentaba antes, se empezaba a subir de salida la subida de 2 kilómetros, y  el pelotón se lo tomo con relativa calma. No se iba muy deprisa, con lo que más o menos conseguí pasar esa subida con cierto “decoro” deportivo. Por delante, sí que vi a alguien escapado, pero bastante tenía con lo mío como para fijarme en quien era.
La bajada hasta Cobeña, no es que fuera muy difícil, pero tenía un par de curvas algo cerradas, con lo que se ve la gente que baja bien y la gente que baja fatal, porque hay unos cuantos que trazan con su bici como mi hijo de 3 años hace una línea recta con un lápiz, un desastre.
Comenzaba la segunda subida a la salida de Cobeña y aquello se estiraba pero no se rompía…..aún. Lo pase mejor que en el primer repecho, así que pensé que quizá podría aguantar hasta bien entrada la carrera.
Pero rápidamente me sacaron de mi ilusión, ya que al pasar por meta y comenzar la segunda vuelta, entre que iba mal colocado, por delante dieron un buen arreon y el viento entro lo suficiente para que por delante encunetaran, el caso es que me quedé cortado y recuperar esos 5 metros, 10 metros, 15 metros, 25 metros, 50 metros……………………..era imposible.
En la grupeta con la lengua fuera del esfuerzo.

Ya por detrás, comenzó a formarse la grupeta. Al principio éramos dos, luego 5, luego 10…………….según iban pasando los kilómetros, íbamos recogiendo “cadáveres” del paquete. Por delante irían haciendo su carrera, mientras que nosotros, nuestra táctica era ir a ritmo en las subidas y luego en las bajadas no caerse, hacer los relevos que pudiéramos y que no nos echaran de carrera.
El mapa y perfil del Strava

Los datos del Garmin

Algo que no pudimos evitar al paso por meta por cuarta vez, antes de comenzar la quinta y última vuelta. Los que entramos en esa grupeta, algunos se quedaron mientras que otros tantos, nos hicimos a pesar de estar fuera de carrera, la quinta y última vuelta, ya que aunque no nos clasificaran, al menos, hacemos 12 kilómetros más en un entrenamiento de calidad.
Al menos salvamos el día sin caídas ni percances, que siendo los primeros kilómetros de la primera carrera en Madrid, los 200 participantes queremos estar delante, aún hay fuerzas, ganas, esperanzas y objetivos, los cuales con el paso de los días y las carreras se irán diluyendo para dar paso a simplemente presentarse (en muchos casos ni eso) y hacer lo que uno pueda lo más dignamente posible.
Porque no nos engañemos, en la primera carrera de la temporada, todo el mundo piensa que ha entrenado bien, que lo ha hecho más y mejor que los demás, que este año es su año, que en la primera carrera estando atento puede dar la campanada y ser amarillo al finalizar el día.
El que niegue ese pensamiento los minutos, las horas, los días anteriores a la primera carrera, simplemente miente. Luego, la realidad es muy distinta, te ponen a desfilar la danza de la lluvia y en fila de uno rápido, y te das cuenta que contra ciertas cosas o filosofías de equipo, no puedes luchar, contentándote con intentar acabar en el primer pelotón y en el mejor de los casos, haber dado un palo en el algún momento y quizá (repito, y quizá) cazar alguna fuga que dure los 10-15 kilómetros de rigor, antes que la apisonadora azul y negra te pase por encima.
Así creo yo, que es la realidad en el 90% del pelotón máster en Madrid ahora mismo. Pero bueno, es lo que hay y habrá que ceñirse a los tres mandamientos: pasarlo bien, dar buena imagen y no caerse. Ahora más que nunca, creo fielmente en estos tres mandamientos.
Por mi parte, acabe contento a pesar de haberme quedado pronto y llegar fuera de control, lo tenía asumido desde antes de comenzar la carrera, para mí, era un entreno de calidad de cara al futuro. Yo no subo un pimiento, así que en este tipo de carreras lo paso mal y sufro mucho, y a eso le sumas que es la primera, que hay 200 tíos con ganas y se sale a balón parado nada más subir, apaga y vámonos.
Pero como se suele decir, todo suma. Quien sabe, a lo mejor a lo largo de la temporada, tengo mi pequeño momento de gloria, solo hay que ser paciente y saber estar en el momento adecuado. Seguiremos intentándolo.
Y al día siguiente: Illescas.
Hasta la próxima.

jueves, 2 de enero de 2014

Carrera : CX El Escorial

Carrera: CX de El Escorial
Lugar:  El Escorial (Madrid)
Fecha: 29 de Diciembre de 2013

El trancazo sigue pasando factura.

Este pasado domingo se disputo la última carrera de ciclocrós en Madrid, mi última carrera de ciclocrós de la temporada y mi última carrera de ciclocrós en Máster-30.

Después de como siempre, dejarlo atado y bien atado en casa, me presente allí a una hora muy temprana, casi a las 8:15 de la mañana cuando aún no habían puesto ni las calles, así que pude completar la inscripción con calma.

Una vez hecha la inscripción, tocaba ver el circuito y esta vez, en vez de hacerlo en bicicleta, por primera vez me lo anduve por completo, los buenos lo hacen, así que había que probar. Desde luego, esa primera vez, ves cosas que quizá en bici no ves, piedras, agujeros, ramas……….bueno, si fuera de los buenos, podría aportarme algo, pero no es el caso.

Una vez terminada la inspección del circuito, tocaba cambiarse y darse unas tres vueltas ya con la bici, y confirme lo que había visto andando: el circuito me gustaba y mucho. La última vez que corrí allí, fue en el 2011 y se disputaba en sentido contrario, con lo que el circuito tener casi todas las curvas a mano izquierda en vez de a mano derecha era un cambio sustanciable.

Se dio la salida a la primera manga y pudimos ver otro carreron de Daniel Lorca, que gano como, cuando y donde quiso, dejo al segundo a una distancia sideral. Se nota que entre él y todos los demás hay un mundo, por lo que parece, este corredor ya ha dicho que el año que viene a pesar de sus 40 y pico años, correrá en Elite. En mi opinión, hace lo correcto, busca nuevos retos y me parece bien.

Por cierto, me comentaron que el “amigo de todos” volvió hacer de la suyas y mando a un par de corredores para casa con sus prisas, adelantamientos y maneras. No lo vi, pero me llego la misma versión por varias fuentes.

Poco después nos tocaba a los master-30, esta vez me toco en segunda línea de parrilla, justo detrás de mi amigo Jorge Martínez de Mariscos, que está haciendo una temporada de cx increíble y que si la entrenara a conciencia, estaría en todas las carreras entre los 5 primeros fijo. El que yo estuviera en segunda línea no es por que mejorara mi clasificación, es que la parrilla era más ancha de lo habitual y faltaron algunos de los que iban por delante mía, así que………aunque tampoco estar ahí es garantía de éxito.

En la parrila de salida

Se dio el pistoletazo de salida y como siempre a mil por hora, no hice mala salida y estaba en la mitad del grupo, pase a unos cuantos en la primera vuelta y me sentía que iba a mas, de hecho íbamos cuatro corredores bien juntos, marcando ritmo pero al igual que el día anterior, el trancazo empezó a pasarme factura, no respiraba bien y tenía que ir prácticamente con la boca abierta todo el rato, el pulso no subía y por más que quería no podía.

En la primera vuelta.

Así que como el día anterior, me solté de este grupo y empecé a perder metros, por detrás venia gente apretando así que según venían dejaba que me adelantaran para no entorpecer a nadie.

Mientras tanto las vueltas iban cayendo, teníamos que dar cinco , y vuelta tras vuelta mi amigo Jalisco me hacía un montón de fotos, a esas alturas, ya no sabía si corría por hacer buen puesto o conseguir buenas fotos.




Ya en la última vuelta, y no estando doblado, vino un corredor por detrás y me hizo un cerrojazo de cuidado, vamos que casi me manda al sembrado. Se lo recrimine y me dijo que era competición y no me quejara. Le respondí que era todo un campeón para hacer eso por el puesto 27 y que se si lo hubiera dicho, le habría dejado pasar sin problemas. En fin…….

Otro corredor que venía detrás, lo vio todo y me dijo que alucinaba con ese pollo.

Bueno, el caso es que 27º puesto final de la carrera, las sensaciones, como el día anterior, sufriendo por el catarro y ya pensando en el 2014, donde correré en la manga de los master-40.

Y a partir de ahora toca abandonar el CX y pensar en carretera 100%.


Hasta la próxima.

Años Anteriores
2011
2010
2009